miércoles, 29 de septiembre de 2010

LA ORACIÓN

LA ORACIÓN

¿QUE ES LA ORACIÓN?

La oración, en primer medida es un ícono en la vida de todas las personas, sobre todo, es un acto fundamental en la vida del creyente en DIOS. Sin ella, no podríamos transmitir nuestros pensamientos, ni tampoco podriamos conocer los pensamientos de los demás.
Es un factor que nos conduce a hablar con alguien: declarar sentimientos, quejas y aprender a conocer los pensamientos que están metidos en la cabeza de todos los demás.
Una persona que no habla, ya sea por que es muda, o es demaciado callada, no podría llegar a cierto destino con premura, si no habla, esplicando su deseo o su convicción.
Tardaríamos más usando señas, que moviendo nuestros labios para indicar un propósito. Tenemos que pronunciar palabras para que nuestro propósito sea entendido, y cuando eso hacemos, logramos crear una oración gramatical.
Mirando desde ese punto del lenguaje, aprendemos lo que es la oración gramatical, y ésta, consiste en formar un conjunto de palabras; que puestas en orden de entendimiento, podremos expresar el pensamiento.
Es así como nos expresamos los seres humanos para darnos a entender.
Ahora, para expresar nuestra oración a DIOS, tenemos que ser concientes que debemos saber, que no nos dirigimos a hombres comunes como los del mundo; sino, a nuestro creador, y a ÉL, debemos llegar de una forma diferente a como lo solemos hacer, cuando nos acercamos a los hombres.

Para entender un poco el pensamiento que nos trae de cabeza, es necesario que vayamos al diccionario de la Lengua castellana, para consultar lo que al pie de la letra dice:
ORACIÓN: Obra de elocuencia, razonamiento pronunciado en público a fin de persuadir a los oyentes a mover su ánimo.
Elevación de la mente a DIOS, para ALABARLO, o pedir mercedes.

El diccionario antigüo nos explica de la siguiente manera: Expreción que con una o muchas palabras, forma el sentido perfecto. Saturnino Calleja.

Los cristianos utilizamos muchas formas para acercarnos a DIOS; pero muchas de esas formas no tienen ningún sentido, ya que a veces convertimos la oración adecuada para dirigirnos al REY DE REYES , Y SEÑOR DE SEÑORES, con palabras y frases que se salen de la realidad, y en vez de expresar una sabia oración, nos convertimos en lanzadores de proclamas, reclamos; como haciendole ver que: "mire bien lo que está ocurriendo y lo que está haciendo". A esto ya no se le llama oración, sino "ARENGA".

La verdadera oración pierde sentido cuando la transformamos en "ARENGA"

La palabra arenga en nuestro diccionario dice de la siguiente manera:

ARENGA: Discurso por lo general solemne y de "elevado tono" Se llama así, especialmente el que se pronuncia con el solo fin de enardecer los ánimos.
Discurso de razonamiento largo, impertinente y enfadoso.
Disputa, pendencia.

Este es el razonamiento del dicionario de nuestra lengua catellana.

La sagrada escritura nos narra un pasaje en los Evangelios que dice así: Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mateo 6:5. La Biblia.

Parece que a muchos de nosotros aún, nos sigue gustando el : "ser visto por los demás". Y encaramos ciertas oraciones que en vez de dar la gloria a DIOS, lo que hacemos o pretendemos es: que los que estan a nuestro lado digan o imaginen cosas buenas de nosotros. "ego" El SEÑOR dice; que esto no es bueno, porque nos pareceríamos a aquellos que lo hacen por vanagloria, solo para ser vistos, y aún; por envidia o por alterar los nervios de alguno de los oyentes.

La oración, base de nuestra conducta, es la que el mismo Señor JESUCRISTO nos enseñó. Y aunque no es un método de repetición de la repetidera, si es una guia clara, de como debemos acercarnos a DIOS.

En esta oración modelo, encontramos varias pautas que nos llevan a presentarnos delante de DIOS; como ÉL quiere y no como lo pretendemos nosotros equivocadamente.
La primera impresión que se nos da es: Acercarnos con reconocimiento, de que ÉL, es nuestro PADRE, y a quien debemos acudir de una forma directa a traves de su hijo JESUCRISTO. (Esto es "Reconocimiento) versículo: 9.

La segunda pauta es: Pedir, lo que ÉL tiene para nosotros, antes que cualquier otra cosa que pueda beneficiarnos carnalmente. versículo : 10.)

Tercero: Peticiones que hacemos; para nosotros satisfacer nuestra persona. (carne, mente, espíritu ) versículos: 11-12-13.

La cuarta:: viene de nuevo otro reconocimiento hacia ÉL, solo ÉL. Y es que, sin su voluntad sobre nosotros, nada podemos hacer. Porque tuyo es el reino, el poder, y la gloria. por todos los siglos. Amén. versículo: 13.

Y la quinta pauta es: Que tenemos que perdonar a los que nos ofenden, y no encararlos, ni menospreciarlos, solo porque no están de acuerdo con nosotros.

En las sagradas escrituras no hay otro modelo de oración a esepción de aquella que se hace con el corazón, con los sentidos, sin forma de ofender a otros o menoscabarlos.

Ahora, miremos lo que significa la palabra arenga.
LA ARENGA, es la que se hace con elevaciones de voz, ofensivas, reclamatorias, que tienden a enardecer los ánimos calmados de quienes lo tienen. Un grito de Júbilo, de Alabanza, o una oración de dirección congregacional, debe ser; respetuosa, de clamor santo, de reverencia hacía aquel que nos enseña los buenos modales y comportamientos cristianos.

Todo esto no quiere decir que no podamos orar en voz alta, o a nivel congregacional, porque si no, estaríamos echando por el piso lo que la iglesia primitiva hacía congregacionálmente.

Hace varios días escuché a un hermano dirigir una plegaria al SEÑOR, y quedé boquiabierto al escuchar su forma de dirigirse a su Creador, y la forma como hacía peticiones a DIOS, era una forma pasiva, moderada, y elocuente... Luego, dije dentro de mi: SEÑOR , es así como debemos orar los cristianos; con fuego de DIOS, en el corazón, en las palabras, en el mismo sentir de nuestro intelecto; sin quejas, ni alaridos, ni críticas, ni pensando que haciendo oraciones fuertes y gravosas, vamos a conquistar tu corazón; sino que los santos hombres y mujeres de DIOS, debemos estar dispuestos a seguir el patrón creado por TÍ, para el mejoramiento de tu iglesia, y nosotros poder conquistar tu amado corazón.
Amados hermanos; hagamos: "TESOROS EN EL CIELO"

Para meditar os dejo la siguiente lectura bíblica: Evangelio de Mateo, capítulo 6, versículos 19-20-21.

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